El
juego es uno de los principales medios para el aprendizaje, distracción,
entretenimiento y sana diversión que no sólo ayuda a los niños, sino que ha servido como terapia
y motivación para muchos adultos y es así como en talleres y dinámicas usadas
para capacitación al personal, se añaden el juego en las actividades con el
propósito de de generar una relación armónica y favorecer al trabajo en equipo.
Existen
también dinámicas y/ o experimentos sociales que tienen el propósito de
representar alguna conducta humana o hacer una metáfora de un acontecimiento.
Me ha
llamado la atención un vídeo de un Interesante juego que representa la vida y
nuestra actitud ante ella. Se llama “Una lección para ser
mas humanos //El juego de la cubeta y las pelotas” Llevado a cabo por un
grupo de jóvenes mexicanos llamados “Mensajeros Urbanos interesados en dar
mensajes positivos y de cambio. Lo
pueden ver en insertado en la parte superior de esta publicación o en este
link:
En resumen, se trata
de que están sentados 6 personas en una silla, una detrás de la otra y a cada una se les da diferentes reglas para
que puedan encestar un número de pelotas dentro de una cubeta. Por cada pelota
que encesten se les dará un incentivo económico.
La persona que está
adelante, tiene un número ilimitado de pelotas, además de que ella podría
levantarse las veces que quiera y en
general, ella tenía la libertad para hacer lo que quisiera durante el juego y
aunque no sea su turno.
A la segunda persona,
le dieron solo 3 pelotas, pero a ella le
quedaba más lejos la canasta y no podía levantarse.
A la tercera persona
le dieron solo 2 pelotas y además se le vendaron los ojos.
A la cuarta persona le
dieron solo 2 pelotas y se le taparon las orejas para que no pueda escuchar las
reglas del juego.
La quinta persona
tenía la instrucción de que no podía usar sus manos para encestar las pelotas.
A la última persona no
se le dieron pelotas.
En este jugo no todos tienen
las mismas oportunidades.
Conforme fueron
jugando, era obvio que la primera persona podía encestar todas las
pelotas, puesto que podía pararse y ponerlas directamente en el cesto
sin hacer ningún esfuerzo. La primera persona, ganó mucho dinero.
A la segunda persona,
le tomaba un poco más de trabajo encestar, ya que el cesto le quedaba más lejos
y no siempre le atinaba.
La tercera persona,
como no podía ver, no pudo encestar ninguna pelota.
A la cuarta persona,
se le indicó que podía levantarse hacia donde estaba la cubeta y poner las pelotas
adentro, pero como estaba tapado las orejas, no pudo escuchar las
instrucciones.
La quinta persona, por
más que se esforzó para tratar de poner las pelotas en la canasta, no pudo
hacerlo porque no podía usar sus manos.
La sexta persona es
como si no hubiera jugado porque nunca tuvo pelotas para poder participar.
Al terminar el juego
se les explicó que este juego es una simulación de la vida. No todos nacemos
con iguales oportunidades ni económicas, ni de estudios ni de trabajo.
La primera persona,
representa a una chica de clase alta donde creció en un entorno de buenas posibilidades
económicas y que pudo estudiar en una buena universidad.
La segunda persona,
representa a una clase media donde va a tener oportunidades pero no tanto como
la primera jugadora.
La tercera persona
representa a alguien con discapacidad visual.
La cuarta persona
representa a alguien con discapacidad auditiva.
La quinta persona
representa a alguien con discapacidad motriz.
La sexta persona
representa a alguien de muy bajos recursos que ha crecido en la calle.
Esto no quiere decir
que la persona que está adelante es mejor o peor que la que está al último ni
que sea más o menos capaz. Sólo les tocaron situaciones diferentes.
Lo interesante, es que
este juego se repitió con varios participantes durante varios minutos, hasta
que una persona cambió sorprendente el resultado del juego que había venido
siendo similar en todas las veces que se jugó.
Al principio del
juego, la persona que les da las reglas, les comunicó que la primera persona,
podía hacer lo que ella quisiera: Levantarse, tener un número ilimitado de
pelotas, recoger las pelotas del piso, etc.
Pues bien, en esta
vez, la persona que estaba sentada al principio decidió que con esas reglas que
eran favorables para él, podía usarlas para beneficio no únicamente personal,
sino en favor de los demás también. Entonces, como él podía hacer lo que
quiera, empezó a facilitarles a cada uno de los otros participantes para que
puedan encestar. Hizo cosas como acercarles la cubeta, encestar por ellos,
darles pelotas al que no tenía, etc.
Esto nos da una gran
lección y a mi personalmente me ha parecido muy emotivo el juego.
Conclusión: Qué diferente sería la vida, si nos preocupáramos un poco de ayudar a
los demás y no solamente pensar en nuestro beneficio. Pensemos en cosas elementales
del día a día como ayudarle a un ciego a cruzar la calle, ceder el paso, respetar
a los demás.
Qué diferente sería la
vida si todos los días tratamos de hacer algo, por más pequeño que sea por
ayudar a alguien.
En estas épocas de campaña
electoral es donde más vemos los insultos del un candidato a otro, las faltas
de respeto entre ellos. Presenciamos una falta de moral de los políticos que
han robado sin importarles que sean ancianos, enfermos o discapacitados a
quienes han perjudicado.
Todas estas actitudes
vienen desde el hogar y su formación escolar, por ello insisto en la Importancia
de la inclusión de la Ética y Valores desde los primeros años de escolaridad
Bibliografía:
- Mensajeros Urbanos, 2017, Una lección para ser mas humanos //El juego de la cubeta y las pelotas, México, https://www.youtube.com/watch?v=8wkaOYVuz2o, 14/02/2017.
- Torres, Claudia, 2017, Importancia de la inclusión de la Ética y Valores desde los primeros años de escolaridad, Formared, Quito, Ecuador, http://formared.blogspot.com/2017/02/importancia-de-la-inclusion-de-la-etica.html, 14/02/2017