Llegan las vacaciones y con ellas, viene la pregunta que los padres nos hacemos ¿Qué actividades realizar con los niños para estimular su aprendizaje de una forma lúdica?
Y es que el período vacacional para muchos de los padres sólo se limita a 10 o 15 días durante el año, donde aprovechan a salir con sus hijos. Pero ¿El resto del tiempo, que pueden hacer los niños? Sin duda, muchos de nosotros hemos pensado en matricularlos en un curso vacacional donde puedan combinarse actividades deportivas como la natación, basketball, volleyball y más, con otras artísticas como teatro, magia, danza, pintura, etc.
Si bien los cursos vacacionales son una buena opción para las actividades de los niños en verano, considero que el período de estancia en dichos lugares no debe superar las tres o cuatro semanas. Considero que es sano que el niño en período de vacaciones sea un poco más libre que en período escolar. Por ejemplo, es bueno que en vacaciones ,él sepa que de noche, tiene esa “libertad” de quedarse jugando hasta más tarde y en la mañana pueda dormir unas horitas más.
Las vacaciones son el momento ideal para reforzar conocimientos aprendidos en la escuela de una manera lúdica y divertida. Entre varias actividades que pueden realizarse, me gustaría compartir algunas que en mi condición de madre y profesora primaria han ayudado y divertido a los niños.
1) Actividades al aire libre: Sin duda las actividades al aire libre, ayudan a los niños a seguir reglas, trabajar en grupo, desarrollar la motricidad gruesa, tener y compartir responsabilidades, favorecen el crecimiento óseo y muscular, entre otros. También en niños diagnosticados con “hiperactividad” este tipo de actividades, pueden expresar sus impulsos, canalizarlos, reorientarlos y enfocar su atención y concentración.
Las voy a dividir en dos grupos:
- Deportes: Como el fútbol, natación, basketball, volleyball y tenis son los deportes más practicados en Ecuador según la Wikipedia. En varios centros vacacionales los colegios las incluyen dentro de la asignatura de Educación Física o como extracurriculares.
- Juegos al aire libre: Los niños crean sus propios juegos o los mismos han sido transmitidos de generación en generación y aún siguen vigentes como es el caso de la Rayuela, la Cuerda, el Trompo, las Escondidas. Es importante que como padres y maestros dediquemos un poco de tiempo para enseñar estos juegos a nuestros niños y que permanezcan vivos a lo largo del tiempo. En el año 2009, tuve la oportunidad de hacer un proyecto con niños de 10 a 13 años donde pudimos recolectar más de 80 juegos tradicionales que jugábamos nosotros, nuestros padres y abuelos. Lo más interesante, fue que los niños además de aprender los juegos, se los enseñaban a los más pequeños.
2) Actividades dentro en casa: Los niños en vacaciones, pasan mucho tiempo en casa por lo que las actividades que ellos realizan en ella deben ser de juego pero además de ayuda, por lo que las he dividido en cinco grupos:
- Juegos dentro de casa: Los juegos de mesa ayudan a desarrollar habilidades cognitivas, mejora la capacidad de concentración. Juegos como el Monopolio, Ajedrez, Bingo, Adivina el personaje, naipes, etc. Son juegos que se han mantenido durante muchos años y en base a estos se han venido desarrollando otros similares incluyendo a los personajes favoritos de los niños.
- Ayuda con labores de casa: Es importante promover los valores como colaboración, autonomía, responsabilidad. Asignarle al niño una actividad diaria que la pueda realizar él solo, le da confianza en sí mismo de que puede realizar las tareas y al mismo tiempo tendrá la satisfacción de haberla cumplido bien. Esta tarea, va a depender de la edad y el grado de madurez del niño. Por ejemplo a un niño de 4 años, se le pedirá que ayude a regar las plantas, y al niño de 8 años, se le puede pedir que lo haga solo.
La cocina es otra actividad que está relacionada con la ayuda en labores de casa y que ellos disfrutan siendo partícipes. Ayudar a amasar para hacer empanadas o batir los ingredientes para hacer un postre.
- Lectura: La lectura es un hábito que adquiere desde las edades más tempranas, los niños disfrutan oyendo contar cuentos, adivinanzas, trabalenguas, etc. Incentivar que los niños lean y comenten los cuentos o libros es una actividad que les permite imaginar, contextualizar y relacionar el contenido con situaciones reales de la vida de cada uno.
- Arte y música: Otra de las actividades que no pueden faltar en las vacaciones, son las dedicadas a desarrollar la motricidad fina, espacial y artística. Los juegos de moldeo con plastilina, pintar con colores, témperas y acuarelas permiten a los niños convertirse en una artista y que proyecte sus emociones. Jugar a disfrazarse, imitando a algún personaje o convertirse en un afamado músico al tocar el piano son entre otros, momentos de diversión y estimulación.
- TIC´s (nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación): Las TICS´s también deben estar presente dentro de las actividades de los niños aunque como padres debemos establecer un límite de tiempo al día para ello. El ver televisión, es una de las más apetecidas por adultos y niños ya sea de un programa educativo o una película de acuerdo a su edad. La música es parte de nuestras vidas, ya que crea sueños y los sueños nos traen emociones. Una actividad que les estimula y les encante es el Karaoke. El internet nos permite buscar pistas de las canciones favoritas y los niños tratan de seguir la letra. El tema de las TIC´s es muy extenso y hay infinidad de recursos en la red. Como madre y educadora utilizo recursos de juegos on-line como El Ahorcado, Crucigramas, Rompecabezas, cuentos, etc.
3) Paseos y visitas a lugares artísticos: No podemos dejar de lado los paseos familiares como excursiones, visitas a museos, obras de teatro, bibliotecas donde a demás de disfrutar en familia, hay oportunidad para socializar con otras personas, disfrutar del paisaje y aprender.
He propuesto algunas opciones de entretenimiento, y diversión en el período de vacaciones tratando de integrar el juego con el aprendizaje, recordemos que este es un período de descanso y como padres aunque no podamos compartir todo el tiempo con nuestros hijos por nuestros trabajos, podemos convertir estos momentos en tiempo de calidad para desarrollar en ellos nuevas habilidades y vínculos afectivos.